Socovesa asegura que demanda por vivienda no ha disminuido
Que el ritmo de crecimiento en la construcción se normalizara, “era completamente esperable”, señala el gerente general de Socovesa, Mauricio Varela.
Pero en la compañía están tranquilos. Dada su estructura financiera, lograron aprovechar el boom inmobiliario de 2012, lo que significó un crecimiento de las promesas de 30%, y, para este año, el crecimiento proyectado es de 10%, considerando el factor de normalización, mientras que la industria este año crecería entre el 0% y el 5% si la economía lo hace a tasas más parecidas al 4,5%, comenta.
Crecer más que la industria los tiene contentos y a junio acumulan un alza de 9%, lo que confirma sus proyecciones. Este desempeño, comparado “con la base de 2012, que son niveles muy altos de venta, es de un año sólido. Incluso, si creciéramos menos que el 10%, sigue siendo un año sólido”, enfatizó el ejecutivo.
En línea con este comportamiento, los costos de construcción también comenzarían a bajar, estimó Varela, aunque producto del encarecimiento de la mano de obra, existe un déficit del 10% de trabajadores por proyecto, lo que compromete los plazos de las obras.
Los resultados de la encuesta de crédito del Banco Central tampoco son motivo de alarma, precisó Varela. El hecho de que las inmobiliarias estén pidiendo menos créditos es normal “porque las compañías no van a estar lanzando tantos proyectos como en la etapa alta del crecimiento y están con presión de costos de construcción bien relevantes, lo que hace que las compañías revisen sus proyectos en detalles, porque sale caro construir y como la economía no está tan fuerte, hace preguntarse si se puede vender a los precios que se quiere y que hay que vender para poder hacer un negocio razonable”.
En el caso de los consumidores, indicó que es necesario que haya estabilidad en las reglas del juego respecto del otorgamiento de crédito. Si bien la industria aprendió la lección de 2008, cuando las condiciones de crédito eran más flexibles y se vendían propiedades sin pie, la actual regla de exigir el 15% de pie -a su juicio razonable- hace que para muchos sea más difícil adquirir una vivienda, lo que golpea al segmento medio, que no es beneficiario de subsidios ni cuenta con la solvencia de los segmentos de mayores ingresos.
A pesar de esto, la demanda por viviendas no ha caído, dijo Varela, ya que los factores empleo, tasa de créditos y crecimiento, siguen impulsando la intención de compra.
Actualmente, Socovesa puso énfasis en el conocimiento del cliente y lo que aspiran al comprar una vivienda. “Tradicionalmente, competíamos por precio. Nos salimos de ese modelo y competimos por diferenciación, buscando vender viviendas con mayor valor agregado. El cliente está dispuesto a pagar un poco más por mayor estándar de calidad”, indicó Varela.
Otros destinos
Por ahora, Socovesa no tiene planes de salir del país. “Estamos con una tremenda carga de trabajo”, comentó. Además el negocio inmobiliario tiene un fuerte componente local, lo que demanda un conocimiento acabado del mercado y su cultura. “Dentro de la industria, somos bastante grandes, pero tenemos un 8% del mercado en Chile, por lo tanto el espacio que tenemos para crecer es bien grande todavía. Tenemos un rato largo para estar acá”.
Si bien el crecimiento fuera de Chile no está dentro de las primeras prioridades de la empresa, están en contacto con compañías peruanas, y en el caso de Colombia, esperan juntarse con empresas de ese mercado en los próximos 12 meses para interiorizarse del mercado. Varela afirmó que en este punto “estamos siguiendo las estrategias de los retailers, que crecieron todo lo que pudieron en Chile, y cuando se les hizo difícil crecer, miraron afuera”. Agregó que dado el dinamismo del mercado chileno, “creemos que vamos a desarrollar las habilidades que hoy tienen las compañías de los mercados desarrollados, porque el mercado lo está empezando a requerir”.
Recuadro:
Los pasos en el segmento del lujo
Dentro de las inversiones que Socovesa realizará este año en obras inmobiliarias -por US$ 330 millones- hay proyectos que alcanzan las 50.000 UF por unidad, lo que marca el ingreso de la compañía al segmento del lujo.
La decisión “responde a una fuerte expansión de ese mercado tanto en ésta como en todas las industrias, orientado principalmente a un segmento de consumidores AB de gran exigencia”, indicó Mauricio Varela.
Actualmente, cuentan con dos proyectos emblemáticos: el edificio Los Olivos de San Rafael, con Almagro, y el proyecto El Tranque, con Socovesa. En el caso de los Olivos, de sus 12 departamentos de la primera etapa, ya se han vendido siete, poco más de un 50%. De ellos, dos son departamentos sobre 50.000 UF y otros cinco superan las 37.000 UF.
Con El Tranque -condominio de 17 casas- en dos meses ya hay cuatro viviendas vendidas. El rango de precios para este proyecto fluctúa entre las 38.000 y las 42.000 UF.
“Todos estos antecedentes confirman cómo se ha sofisticado la demanda por viviendas y consecuentemente, nuestro negocio. Nuestra apuesta es ofrecer el mejor producto en cualquiera de los segmentos en los que participemos”, dijo el ejecutivo.
330 millones de dólares invertirá la compañia este año en obras inmobiliarias. que implican 4.500 viviendas nuevas.
10% de trabajadores faltan en las obras. Este déficit ha comprometido los plazos de avance de las construcciones.